¿Y si resulta que el domingo nos toca algo? ¿Y si, como dice Forges, nos toca algo más que el reintegro? Y si me toca, ¿ahora qué hago? Pues lo primero primerito que tienes que hacer ya te digo yo: ¡Pagarle a Hacienda su parte! Que además no es poco…
Algunos lo llaman el día de la salud, por aquello de que a todos los que no nos toca imploramos que al menos tenemos salud. Pero últimamente se va a abriendo la vía alternativa de: «Bueno, prefiero que no me toque porque para que se lo lleve Hacienda…».
Y en parte tiene su razón, porque si hay alguien que no pierde el día 22 es el fisco, que estima que se llevará unos 175 millones de euros. Ahí es nada.
Pero, volviendo a nuestra realidad y a la pregunta que me hacía al principio: «Si a mí me toca, ¿cuánto me quita hacienda?»
Pues si eres de los agraciados, te tocará pagar un 20%. Es un tipo fijo, así que da igual que ganes 1 millón, que 100.000€. Toca pagar un 20% del montante total que te toque. Además, no tienes que preocuparte de ir a Hacienda a ingresarlo, si no que la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (SELAE) tendrá la «amabilidad» de retenerte esa parte e ingresarla en Hacienda por ti.
Eso si, existen unos mínimos por lo que no se paga nada y, que en los últimos años, han subido un poco. Para 2019, ese mínimo por el que no pagaríamos nada está en 20.000€. Es decir, si el premio está por debajo de esa cantidad no habría que tributar nada. Y si está por encima, solo tributará la parte que lo supere.
Para el año que viene, 2020, ese mínimo se sube a los 40.000€, con lo que lo mismo nos interesa que nos toque el niño… vaya apunte de planificación fiscal…
Otra cosa importante a tener en cuenta de estos límites es que se aplican de forma independiente respecto cada décimo. Es decir, en caso de premios compartidos (mis compis del trabajo, mis amigos, mis suegros,…) esa parte exenta también tiene que repartirse entre todos. ¿Cómo? Un ejemplo:
Javier ha tirado la casa por la ventana y ha comprado un décimo para que juguemos los dos. Y resulta que la diosa Fortuna ha iluminado la enorme generosidad de Javier, y nos tocan 50.000€. Peleas a parte para que Javier reconozca que el premio es para los dos y que ese whatsapp que me puso con el décimo no era una equivocación, resulta que nos toca a cada uno 25.000€. Pues tendremos que tributar cada uno el 20% de 15.000€, ya que solo podremos restar 10.000€ del mínimo cada uno:
Ya sabéis, la policía no es tonta y nos quiere poner límites para que no tengamos la tentación de decir que el premio lo hemos ganado entre más de la cuenta y así evitar pagar nada.
Así que solo me queda que cruzar dedos, y esperar que al menos un pellizquito de lo que se lleve hacienda este año salga de vuestro bolsillo. ¡Que tampoco será mala señal!
Salvador Moreno Blanca